Qué Podemos Hacer Para Proteger Las Plantas

Este artículo fue publicado originalmente en el sitio web de Inter Press Service (IPS).

Sequías consecutivas seguidas de plagas de langostas han llevado a más de un millón de personas en el sur de Madagascar al borde de la inanición en los últimos meses. En la peor hambruna en medio siglo, los lugareños han vendido sus posesiones y están comiendo langostas, frutos de cactus crudos y hojas silvestres para sobrevivir.

Airear el suelo de vez en cuando

¡Fundamental! Y no solo en plantas de exterior, expuestas al frío y las heladas. También tendremos que tener en cuenta esta tarea en plantas de interior, ya que la acción del riego puede apelmazar el sustrato.

Lejos de ser complicado, airear el suelo se puede hacer fácilmente con un rastrillo y superficialmente. Con esta acción, por un lado estaremos aflojando la tierra: algo que favorecerá la absorción de agua y nutrientes, y permitirá que nuestras plantas mantengan su buena salud. Pero no es el único objetivo: gracias a este rastrillado, también estaremos eliminando los insectos que han podido anidar y crecer en la superficie de la tierra.

Agregue mantillo

Una capa de mantillo puede ayudar a proteger las plantas perennes y los arbustos y árboles recién plantados cuando llegan las bajas temperaturas. A medida que el suelo se congela y se descongela, puede exponer algunas raíces por encima del suelo, haciéndolas aún más vulnerables. El mantillo ayuda a proporcionar una capa de protección para las raíces de la planta en estos casos.

Si tienes árboles jóvenes o variedades de corteza fina (incluidos algunos frutales), envuelve el tronco con cartón, mantas o tela. De lo contrario, como la corteza se expande cuando la temperatura es cálida y se contrae cuando se enfría, es probable que se rompa. También puedes usar plástico para cubrir árboles y plantas, pero asegúrate de que sea de color negro para que refleje los rayos del sol y no cree un efecto invernadero en el tronco.

Cambiar fertilizantes químicos por algo natural

El uso de fertilizantes químicos en el jardín genera problemas de desequilibrio nutricional. Estos problemas hacen que las plantas sean más propensas a plagas y enfermedades. Por eso, el mejor método para evitar estos problemas es utilizar microorganismos que aporten nitrógeno y otros nutrientes necesarios para que las plantas estén verdes y sanas.

Para que las plantas se desarrollen en un suelo sano y libre de patógenos, se deben aportar productos que aporten nutrientes al suelo. Una estructura con microorganismos aumenta la absorción de nutrientes por parte de la planta, obteniendo mayor tamaño y vigor.